El Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, afirmó el 9 de enero de 2009: «No hay desacuerdo en que necesitamos una acción de nuestro gobierno, un plan de recuperación que ayude a reactivar la economía». Los economistas firmantes del manifiesto puntualizan: «Con todo el respeto debido al Señor Presidente, esto no es cierto. A pesar de que todos informes de los economistas son ahora de corte Keynesiano, y que todos apoyan un gran incremento en el presupuesto del gobierno, nosotros, los abajo firmantes no creemos que un mayor gasto público sea una forma de mejorar el rendimiento de la economía.
El mayor gasto público en época de Hoover y Roosevelt no sacó a la economía de los Estados Unidos de la Gran Depresión en la década de los 30. El mayor gasto público del gobierno Japonés no resolvió la «década perdida» en el decenio de los 90. Por tanto, creer que el gasto público ayudará a los Estados Unidos hoy en día constituye sólo un triunfo de la esperanza sobre la experiencia. Para mejorar la economía, las políticas deberían centrarse en reformas que eliminen los obstáculos al trabajo, al ahorro, a la inversión y a la producción. Tipos impositivos más bajos y una reducción en el gasto del gobierno son las mejores formas de utilizar la política fiscal para impulsar el crecimiento». Y lo firman más de 200 economistas de Estados Unidos. http://www.cato.org/special/stimulus09/cato_stimulus.pdf
Publicado en www.a1h3.com el 12/02/2009